08 febrero, 2016

DE PUNTITAS


Y cuando estoy en el cuarto, y camino desesperada a cualquier lugar, con nada encima de mi friolento casi treintañero cuerpo, me elevo sobre mis dedos para fingir a la ley de gravedad, para parecer más alta y para que no me enfríe más.

Me abrazo fuerte con mis manos y brazos mientras que mis dientes se desentienden de mi cuerpo y alcanzan una velocidad de miedo, involuntariamente haciendo ruidos extraños.

Acelero el paso porque creo que le haría justicia a mi desnudez abrigarme, pero tropiezo y mi error de dedos me hace bajarme de ellos hasta tocar el piso con los talones. Que atrevimiento, que verguenza, que locura. Ahora estoy toda plantada en la tierra y la tragedia es que no llevo prendas....

... y creo que al no hacer contacto total con mi herramienta corporal de sotenimiento y transporte personal (los pies), pasaba desaparcibida por el universo mi falta de ropaje...

... Y me transporto a un universo paralelo donde de puntitas puedes andar bichi de putita y sin el contacto total la planta, engañas a la visión exterior con cualquier imagen de tu cabeza.


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