25 junio, 2021

PESADILLA DE LITTLE JESUS

 Lei de mi vida en el 2009 aqui en el blog y dije: wey, qué pendeja, como no escribiste mas detalles de tu vida de ese momento. Era un destino, se sabe. Era tu dream y faltó muchísima información.

Este llamado de emergencia en mi psique me ha llevado a la forzosa necesidad de publicar en este segundo algunas de las obviedades máximas del 2021: evidentemente lo más heavy que se tiene que decir es que estamos en medio de una pandemia. Algunos asegurar que ya terminó, otros que estamos en medio de ella: yo al chile me siento aún en lo caótico de lo incierto del presente pero cada vez uso menos mi mascarilla. Eso si, ya me vacuné. Fui por la Johnson and Johnson al Walgreens de Eagle Pass, porque aquí apenas empezarán con la vacunación de los de 30-40 y pos tenía que meterle nitro.

Besides the pandemia, lo más importante hoy, aquí y ahora se llama Zaragoza 444 y no pinches mames que jamás había hablado de mi bazar en este espacio. Me parece una grosería y una reverenda mamada que haya omitido por tantos años a la razón de mi vida. Real asi lo veo, como mi vida entera. Long story short, es un bazar ubicado en la antigua casa de mis abuelos. En esta tienda tengo artículos de segunda en su mayoría pero también un espacio dirigido a nuevos emprendedores, el cual llamo Concept room, y les rento metros a las marcas emergentes.

Ok, recapitulemos: vivo todavía con mi mamá y con Nina. Esta la casa bastante cambiada desde este tiempo de pandemia porque le metió chorros la jefa. Mañana en la mañana voy a ir a desayunar con Wita a los tacos de Pily porque de ahí nos vamos a ir a los funerales García a darle el pésame a nuestro amiguito Ivan porque se murió mi tia Catina. 

Después de desayunar voy de Mila de secundaria a hacerme pedicura (estoy seriamente pensando en ponerme por primera vez blanco) y después un masaje relajante (oila, pos cual estrés?), todo esto es con Azalea, la que vive anca la chingada pero vale totalmente la pena el viaje que son pinches 10 minutos que ni es nada en el pueblo.  A las tres tengo manicura con Wendy. Es que wey, la verdadera razón de mi emperramiento es que voy a ir a Mazatlan este weekend con Kike, Samantha y la familia de Sam. Estoy emocionadilla porque se que será algo nuevo, comeré delicioso, me meteré al mar y problabmente regrese negrita.

Llegando de Maza me espera el más grande de los destinos que es ver a Little Jesus en el Pabellón M. No es el primero concierto post pandemia (aaaaaaa andale! sola, sola, sola babosa sola, ya dijiste POST PANDEMIA), el primero fue de Efelante en el Cafe Iguana y fue un viaje astral. Pero bueno, nada de la dimensión de Little Jesus, realmente ver a Poni en el stage será el mas grande de los placeres terrenales. Escuchar pinche disco de oro en pinche vivo. Wey cuando sabemos perfectamente que mi color es el dorado, que si piensas en oro piensas en mi y que un día la cachorra me dijo en el ultimo mail que me mandó "stay gold"


Otro que es muy Golden boy es el otro niño Poni que me tripea a lo pendejo, el de la banda que fui a ver hace quince dias, pero es que real es un niño y no entiendo porque me tripea tanto pero lol que ama el viaje de lo golden, uf papito, eso yo lo traía de moda hace 12 años, maybe you were on kindergarten.


Después de Little Jesus, el destino mayor será Puerto Escondido, weeeeey mamalón, neta no puedo creer que todo se acomodo perfecto para que fuera a la costa de Oaxaca este verano: muy necesito. Que chingón que la vida me esta dando oportunidad de hacer lo que mas quiero, y pos sobre todo que el negocio esta dando para esto y esperamos que para mas. A Puerto voy con Nancy, Diana y Linda. Y neta no mames que llegado a los dos meses volvemos a ir a Oacaxa al viaje de generación. Mamalon.

Asi Ła vida hoy en dia, a ver, déjame agregar mas cosas importantes como que voy a la bici casi todas las tardes con Dorita, Chicharo, Laurita y Dani. También acabo de terminar dos meses de ejercicio con Gabi la perra en el Marabunta. 

Me mama ir a Monterrey como siempre y ahorita traigo de moda al Mob, Ryoshi, cafe Kali, Topaz deluxe, Music lab.

Estoy escribiendo en una lap que me compré hace un par de meses y que amo bien cabrán. Mi cel es un iPhone maybe 12 que me relgaló mi ex en una navidad. Hablando de vatos, me acabo de inspirar para escribir un cuento o un inicio de libro o tatuaje que se llame "Cherchez l'homme", basado en la primicia d que todos mis problemas tienen su raiz en un cabrón.

Hablando de vatos, tbh no estoy ahorita encalada de nadie y eso es super super raro. El último que me gustó en serio fue un pendejo que vive en Connecticut a la verga del cual me enamore porque escribía poemas en su maquina de escribir. Empezamos a platicar por Instagram y después escalo a llamadas y FaceTime. Duró una buena temporada, chance como tres meses pero el wey acaba de andar con una morra de nys y honesly no lo culpo, date wey, estamos a todos los kilometros del mundo de distancia.

no mames, ya iba a dejar de escribir y me acorde de que lo mas relevante de mi vida puede que sea que estoy ahorita pintando bien cabrón. Ni siquiera se si esta chido lo que hago, pero wey, soy artista. Neta ya me la estoy creyendo. Empezó justo en el inicio de la pandemia, y poco a poco fue creciento. No se cuantos cuadros llevo, pero chance unos 20. Estoy mega enwilada porque jamas pense que fuera a ser tan buena y tan productiva. Ahorita estoy trabajando en dos proyectos: uno muy extensivo y otro individual. El que es uno solo, es el retrato de una amiga semi nueva que apareció hace dos meses cuando me invitó a pintar un mural feminista en Rosita. El otro de los trabajos, es un proyecto que quiero que sea algo muy cabrón como una Expo o asi. Se trata de una obra de varias pinturas relacionadas con el desierto "FACETA MANIATICA DESERTICA", asi me quise poner. Y pos botas, nopales, alacranes, sunsets. Ya sabes. Onda muy wild wild west pero Coahuila wey. Porque de aqui soy y aqui estoy, y ni modo que me ponga a hablar, escribir o pintar de otra cosa que no sea esto.


SLEEPYHEAD

Entrevistador: ¿Cual es la canción que mas te ha hecho llorar y porque?


Yo: Definitivamente no es con la que más he llorado, pero si te puedo asegurar que es con la que he llorado con más sentimiento en mi perra vida. Ese día que la escuché era una noche de verano del 2011 en un hotel en Saltillo. Me habían dado de alta de mi primer internamiento de rehabilitación. 


Para empezar, fue la primera canción que escuché después de meses, MESES de no poder oír música. Entonces, el simple hecho de poder tener el privilegio de escoger una canción y escucharla fue un chingo. 


Escogí esa rola porque fue justo Passion Pit la última banda que escuché en vivo en el Escénica en el 2010, antes de mi primer rehab (spoiler alert: fueron 4 y 2 anexos en 10 años). 


El 2010 fue una extensión forzosa del 2009, que en realidad tuvo su inicio oficial en el 2008, pero como no nos interesan los años ni las fechas fijas porque ni siquiera creemos en la existencia del tiempo como producto tangente, vamos a llamarle la época Safari, que puedo decir fue mi heavy despertar musical, porque tbh realmente nunca había tenido un acercamiento tan cabrón a música que me fascinara y de la cual me sintiera fanática total, y los años de Safari me regalaron todo eso.


Fue la entrada al fascinante y emocionante universo de los conciertos de bandas indie medio conocidas pero con un beat sensacional que retumbaban en todas las escenas del mundo: que si MGMT, Cut Copy, Vampire Weekend. Para mi fue la Golden age, sin duda. Y claro que fue más Golden que nada porque iba a acompañada de personas destino que hicieron inolvidables esos meses de histerismo colectivo. Tenemos en primer plano a las mamitas: Natalia AKA la Cachorrita y a la Niña Beta AKA Niña Atún. Ya con ellas te armé un escándalo. Los demás, llamémosle eventuales como la Puta Cola Loca. The Pablos. Changoleón. Niña Modelo. 


Anyway, de regreso al tema de la canción de Sleepyhead, me pegó bien duro esa rola ese día que la chillé con el alma,  porque me transportó a un año anterior donde vivía en mi perfecta utopía. Y el escuchar la rola me puse mal mal mal porque lo único que pensaba es que todo eso se había verdaderamente terminado y no cabía posibilidad de que volviera a pasar, en ninguna de sus versiones. Y no pasó. Sabía que esa rola me estaba gritando y golpeado: se pinches acabo. Ya fue. Ya no hay Safari. Tira al león.


Pasó que esa noche fue el entierro de mis años maravillosos, donde pensé genuinamente que no volvería a pisar un lugar repleto de gente donde estuviera la banda tomando y fumado y metiendo mugrero (plot twist, si volví a esos lugares). Pero neta que en ese momento yo estaba totalmente coco washeada y sabía que no había retorno y que no había manera que volviera a consumir y que ese momento clímax que viví escuchado Passion Pit literal en el passion pit del Escenica, el after en el backstage y todas esas mamadas tan geniales, solo serían el prime time de mi vida.


Se sabe que después de eso, si pasó mucho y no fue la hecatombe que imaginé, pero en ese momento lloré y lloré tanto por mi, estaba desconsolada, triste, sin ilusión alguna. Para mi todo lo bueno había acabado y a partir de ese momento solo me quedaba continuar sin Passion pit, sin pasión y sin pitos.


Poco iba a saber yo en ese momento, que aunque efectivamente si fue mi ultimo concierto tomando y que no volví a probar licor alguno, en múltiples ocasiones volví y volví a pisar conciertos, tocadas, festivales. En muchos me puse hasta la madre con weed, pero en la mayoría en estos 10 años, me la pase sobria, completamente sobria, anestesiada por los sonidos a la potencia y por la euforia del público.


Nada ha sido como cuando los tiempos de la jungla, pero han habido muy buenas replicas.