06 mayo, 2018

RETAIL REAL STATE IN NYC


Para mí siempre tuvo mucha fuerza el 30 de abril porque ese día anduve con Fritz por primera vez. Un dato curioso: fue el día que fuimos a ver Mean girls, mega lol, creo que ese día se estrenó ylv.

Después del 2004, cada vez que se llegaba ese día, suspiraba con la melancolía de una niña que perdió su muñeca favorita. Ñoñísimo pero no hay otra forma de explicarlo.

Transcurrieron no se, seis, siete años con esa presencia de lo incerrable (dícese de que no se cierra algo).

Y así hasta que un día dejó de ser importante, o lo olvidé, o algo más importante pasó un día del niño. O no pasó nada. O pasaron tantas cosas que ocuparon ese lugar y ya. Las cosas que fueron importantes se hicieron triviales.

Hace una semana estaba en NYC y le mandé mensaje por instragram a Fritty. Lo busqué primero por fb pero vi que cerró su cuenta. En la otra red me contestó al instante. La conversación fue más o menos así:

-Hey, are you in NY?
-Yes! I live here now, why?
-I’ll be there for the weekend, let’s meet!

No se que bomba hubiera explotado si nos hubiéramos tenido de frente. No pasó.

Vine de viaje con un grupo de estudiantes y la única que domina el idioma soy yo entonces no había manera de poder sordearme un segundo. En Torreón, el otro viaje de estudios, había chance de irme a hacer mis cosas porque a los niños los entregábamos a familias en la tarde y no los veíamos hasta el día siguiente.

En este trip, qué diablos.

Son días de estar con ellos 24/7. Literal. Y son 24 cuerpos hormonales con mentalidades post millenials. Exacto. No había forma de que pudiera ir a encontrarme con este wey.

Como quiera le hice mi luchita, digo, porque uno nunca sabe y chicle y pega. El punto es que cuando nos empezamos a poner de acuerdo de donde y a qué hora nos veríamos, me gustó que lo hizo ver muy casual, así de “Caele a este bar a partir del medio, estaré con mis amigos hasta tarde". 

Sábado en la tarde en Brooklyn. Vato, chingame la vida y complícame la existencia, ósea ¿sacas que no planeamos salir de Manhattan ¿Cómo por qué vergas me mandas a cruzar el bridge?.

Pensé, bueno, deja dormir a las criaturas y me escapo un ratito, pero ¿cómo lo explico?. Niveles excesivos de cansancio que no lograban que mi cuerpo diera un paso más después de las doce de la noche. Y súmale las rondas. Los rondines: ir cuarto en cuarto a checar que las niñas no se salgan de su cuarto, que los niños no se metan al cuarto de las morras, que no se salgan del hotel, que no compren pisto, ni drogas, ni putas. Exacto: son pre milleanials con mucho mucho dinero, mucha mucha imaginación y mucha mucha información. Obvio todo se puede salir de control en cualquier segundo, como se salió.

Equis, volviendo a Fritz. No llegué al Pig. Le mandé mensaje al día siguiente y tampoco pudimos vernos. Ni volveré a verlo, ahora si lo se. Y está bien.

Chance si todavía quedara algo me hubiera clonado, teletransportado, hubiera hecho viaje astral o detenido el tiempo, hubiera logrado esa madre que hacen las mujeres de fe para estar en dos lugares a la vez, hubiera amarrado a los niños, no sé, algo, un plan. Para eso soy buenísima y para hacer lo que quiero y para salirme con la mía y para no quedarme con las ganas, etc.

Entonces no lo vi porque no lo quise, eso lo entendí. Y un pendiente menos. 

NOTA FINAL:
1. Tiene fiancé. Obvio eso afectó a la toma de decisiones y prioridades.
2. Bendito Dios una vez que contraiga nupcias, habré casado a todos mis exes. Y otro, otro pendiente menos.

2 comentarios:

  1. Un post del descontrol estudiantil está pendiente! -Aranza G

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