Casi no me esta gustando el libro que estoy leyendo ahorita. Se llama "La nausea" de Jean-Paul Sartre, pero aquí sigo forzandolo a ver si en algún inesperado momento me cautiva.
No se si es porque le falta amor, pasión y aventura a la novela, o porque al ser el primer libro que publico el autor resta de riqueza.
Lo que sea, no importa, porque como quiera estoy en una crisis literaria pinche al no saber que quiero o a quien quiero leer. Entonces me conformo con todo o con nada.
Y como no estoy acostumbrada a dormirme sin leer, como a bañarme sin escuchar a Sabines, me dedico mis noches a leer por leer a Sartre.
Aqui está una buena pieza del libro, me gusto porque me recuerda no mis aventuras, pero la manera en que cuento las mías. Au revoir.
"He pensado lo siguiente: para que el suceso mas trivial se convierta en aventura, es necesario y suficiente contarlo.
Esto es lo que engaña a la gente; el hombre es siempre un narrador de historias;
Vive rodeado de sus historias y de las ajenas, ve a través de ellas todo lo que le sucede, y trata de vivir su vida como si la contara.
Pero hay que escoger: vivir o contar"
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