15 junio, 2017

I QUIT

Me gusta un chingo fumar. Todavía no me hago a la idea de que ya no fumo. Digo, supongo que en algún momento de mi vida debía de pasar pero yo no lo estaba buscando ni tampoco quería que pasara. Solo paso.

En Septiembre empecé a trabajar con niños y supongo que eso fue una de las razones. De bajarle a la intensidad, un día me empezó a dar asco. Le terquie unas tres veces hasta que fue definitivo: no podía seguir fumando.

Todavía guardo una cajetilla a la mitad en mi cajón por si decido regresar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario